Los datos se están convirtiendo en un activo cada vez más valioso, prácticamente, para cualquier actividad de nuestra sociedad. Ahora suponen elementos tan cotidianos, para las empresas y para los ciudadanos, que la gran mayoría entiende que deben ser compartidos. En este sentido, los portales de datos abiertos están siendo en la actualidad una herramienta facilitadora de gran importancia dentro de la estrategia global de apertura de datos.
Iniciativas en el ámbito internacional
Por este motivo, poco a poco, las distintas administraciones e instituciones están poniendo a disposición de todo el mundo catálogos y portales web enfocadas exclusivamente en los datos abiertos. Por ejemplo, podemos encontrar portales como los de la Unión Europea, el Banco Mundial, la ONU, la OCDE y la FAO, entre otras instituciones, a los que puede acceder cualquier ciudadano y empresa.
Pero no solo eso. Además, se están desarrollando diferentes iniciativas para impulsar el uso y la reutilización de la información pública. Un buen ejemplo es el consorcio europeo, Apps for Europe, formado por una veintena de organizaciones y empresas procedentes de 10 países relacionadas con la apertura de datos y la innovación. Su objetivo es conectar a los diferentes agentes de la comunidad open data en el continente y crear un mercado paneuropeo para aplicaciones basadas en datos abiertos. Para ello, esta red ha organizado un concurso internacional que engloba más de 20 eventos locales, una iniciativa que pretende potenciar el desarrollo de soluciones innovadoras que reutilicen la información pública y ofrezcan una vía de negocio factible.
City SDK es otro consorcio europeo que engloba, en este caso, a 23 organizaciones de nueve países. Su misión es facilitar a los municipios integrantes de estos países la posibilidad de abrir sus datos a los ciudadanos. Para ello, proporcionan a los desarrolladores las herramientas necesarias para crear aplicaciones escalables de una ciudad a otra.
En un ámbito más local, son las distintas administraciones las que ponen su granito de arena en la apertura de datos públicos. Ciudades tan importantes como Nueva York reta a sus ciudadanos a proponer aplicaciones para hacer de la ciudad un mejor sitio donde vivir o trabajar, a través de su proyecto NYC Big Apps. En Madrid, por ejemplo, está el concurso Startup 4 Cities y acaba de anunciar la celebración del concurso de MADdata, dirigido a emprendedores y desarrolladores de base tecnológica que ofrezcan soluciones a los nuevos desafíos del desarrollo urbano creando aplicaciones o servicios innovadores. Para ello, el Ayuntamiento de Madrid cuenta desde marzo de 2014 con un Portal de Datos Abiertos que contiene mas de cuatro millones de registros de información y en cuyos primeros meses desde su puesta en funcionamiento se han realizado 56.000 descargas de ficheros de datos.
Iniciativas como éstas facilitan que los emprendedores y las startups puedan disponer de datos relevantes, por ejemplo, para hacer una aplicación de móvil como punto de partida para poder innovar y reutilizar esa información. Y es que, la apertura de datos públicos puede convertirse en motor de la innovación, pudiendo usar esos datos para definir nuevos servicios o aplicaciones.
Ejemplos de utilidades desarrolladas a partir de la reutilización de información del sector público hay muchos. Moovit, por ejemplo, es una aplicación para dispositivos móviles creada a partir de datos abiertos, que permite planificar trayectos en transporte cruzando los datos de las empresas municipales de transporte de España con la información en tiempo real de los usuarios de la app. Actualmente, esta solución cubre los operadores de transporte público de Madrid,Barcelona, Bilbao, San Sebastián, Vitoria-Gasteiz y Pamplona.
Otras iniciativas privadas
En esta línea también están trabajando cada vez más organizaciones privadas que, además de integrar la estrategia de datos abiertos como parte de su estrategia global, cada vez más está desarrollando iniciativas que animan a emprendedores y desarrolladores a crear herramientas basadas en datos abiertos, a través de competiciones denominadas Hackathon, Datathon, Challenge o Code for, eventos de programación con datos abiertos.
Es el caso de BBVA InnovaChallenge, una clara apuesta de la entidad con el Big Data y la innovación abierta en la que, por primera vez, abrió sus datos de actividad comercial real en una API a la que podían acceder sus participantes para crear las aplicaciones.
En este concurso resultaron ganadoras aplicaciones tan innovadoras como Qkly, un planificador de viajes que reduce el tiempo de espera en las colas de comercios o servicios de pago; Chances, una app dirigida a futuros emprendedores que permite conocer de antemano si un negocio es una oportunidad de éxito o debe ser mejorada: y, BBVAPlaces, un análisis en el que se da respuesta a cuestiones como la relación entre la densidad de locales de una determinada zona y el número de transacciones, además de las valoraciones que los usuarios hacen vía redes sociales como Google Places.
El valor de una estrategia de datos abiertos
Como vemos, son muchas las iniciativas que están aprovechando el potencial de la inteligencia colectiva, el nicho de potenciales emprendedores con el que cuentan entre sus habitantes y el espíritu de la innovación para avanzar hacia una gestión más inteligente.
Además, integrar la estrategia de datos abiertos como parte de la estrategia global de una organización resulta clave a la hora de identificar las principales demandas del cliente o del ciudadano en un mundo cada vez más interconectado.
Gracias al fomento de iniciativas abiertas se puede también, obtener otras ventajas como nuevos canales de feedback a la hora de mejorar la calidad y fiabilidad de los datos; la posibilidad de utilizar herramientas y técnicas que sirvan para establecer nuevos mecanismos de captura y mejora de los datos; o habilitar colaboraciones publico-privadas para la explotación de nuevos datos, de forma que se establezca una cultura global del open data.