La comunicación bancaria es uno de los procesos más importantes dentro de los departamentos de tesorería de cualquier compañía. Las empresas necesitan estar en permanente contacto con las entidades para conocer el estado de sus cuentas bancarias y así poder tomar importantes decisiones que afectan a su previsión de liquidez.
En España, una de las normas bancarias más importante es la norma 43 (o, simplemente, cuaderno 43), un estándar de comunicación que permite automatizar un proceso tan importante como es el de la conciliación bancaria.
La realidad del uso de este estándar podría evolucionar gracias a la apertura de las APIs bancarias, que facilitan su adopción a la mayoría de empresas, ya sean pymes o grandes corporaciones, al favorecer la integración de los extractos bancarios y la automatización de algunos procesos contables que afectan a la tesorería.
Qué es la norma 43
La norma 43 es un estándar bancario que regula y normaliza la transmisión de extractos bancarios de cuentas corrientes. Fue desarrollado por las entidades de crédito españolas a través de sus respectivas asociaciones, con especial participación de la Asociación Española de Banca (AEB). Sirve, en mayor medida, para facilitar un proceso contable tan crítico e importante como es la conciliación bancaria, es decir, el contraste de la información de las cuentas bancarias de una empresa con su contabilidad, a fin de detectar cargos o abonos pendientes y, en general, conocer el estado real de su tesorería.
Las entidades bancarias suelen enviar de manera diaria estos ficheros a las empresas que tengan contratado este servicio a través de redes P2P, generalmente a primera hora de la mañana. Una vez recibido, los sistemas empresariales integran todos estos movimientos en sus sistemas y ejecutan la conciliación bancaria de manera automática. Adicionalmente, las entidades permiten la descarga manual de esta norma.
Este cuaderno está disponible para todo tipo de compañías, ya sean pymes o grandes empresas. Sin embargo, en la práctica, solo las empresas de una cierta entidad lo adoptan debido a la complejidad de su implementación y a lo costoso de su mantenimiento, especialmente si lo que se quiere es automatizar este proceso.
Estructura de la norma 43
Desde el punto de vista técnico, el cuaderno 43 (norma 43) es un fichero que tiene una estructura definida donde están reflejados todos y cada uno de los movimientos (cargos y abonos) de las cuentas bancarias de una empresa durante un intervalo de tiempo determinado. A pesar de que cada entidad puede estructurar este fichero de forma diferente, en la mayoría de los casos consta de varios tipos de registros: saldo inicial, movimientos y saldo final.
Para validar la información, se comprueba que el saldo inicial del extracto de un día coincida con el saldo final del día anterior y que la suma de todos los movimientos dé como resultado a la diferencia entre los saldos inicial y final de ese día.
La norma 43 se estructura en diferentes bloques que identifican todos los registros. Consta de:
- La cabecera, en la que se informa del banco que envía la información y de la fecha del extracto.
- Cada cuenta bancaria que tenga abierta el cliente en ese banco abrirá un nuevo bloque, donde constará la información sobre el saldo inicial.
- Dentro de cada cuenta, habrá tantos bloques secundarios como movimientos se hayan registrado. Los movimientos identificarán cargos (con signo negativo) o abonos (con signo positivo) en la cuenta bancaria. Por ejemplo, una transferencia recibida significará un movimiento positivo, mientras que una retirada de efectivo se contabilizará como un movimiento negativo. Cada tipo de movimiento estará identificado por un conjunto de códigos que identifican cada operación, normalmente dependientes de cada entidad bancaria. Además, el extracto traerá información adicional que permita identificar la transacción a la que hace referencia (pago de una factura, pago de una comisión, etc.)
- Final de cuenta, donde se resume toda la información del fichero, detallando el número de movimientos totales remitidos, así como el saldo final.
Ventajas del uso de la norma 43
Los extractos de cuenta electrónicos cumplen una importante función dentro de los departamentos de tesorería de las empresas. Más concretamente, el cuaderno 43 facilita una comunicación más ágil con las entidades financieras, al tiempo que permite automatizar uno de los procesos más importantes de la tesorería, como es la conciliación bancaria.
Además, gracias al cuaderno 43, las empresas pueden identificar qué pagos se han realizado y cuáles están pendientes, por ejemplo impuestos o nóminas, además del resultado de los cobros. El objetivo es que las compañías puedan tomar decisiones sobre su liquidez fundamentadas en esos datos.
Los inconvenientes de la norma 43
A pesar de la importancia de la norma 43, lo cierto es que también adolece de una serie de inconvenientes. El más importante de ellos es su falta de inmediatez. Las empresas únicamente conocen el estado actual de sus cuentas una vez al día, pero no pueden acceder a su información en tiempo real, salvo que realicen una descarga manual.
Esto puede ser un problema para algunas empresas cuya actividad requiera conocer de inmediato el estado real de su tesorería, especialmente en aquellos negocios donde su flujo de cobros y pagos es continuo. Los responsables de la tesorería se ven obligados a esperar al día siguiente para conocer esta información, que puede no tener mucho que ver con su estado real. Sus decisiones se basan en información relativamente obsoleta, lo que puede perjudicar su utilización y previsión de liquidez.
Además, en muchos casos, la implementación del cuaderno 43 en los sistemas de gestión empresariales es compleja y costosa. Supone establecer un protocolo de comunicación entre el banco y la empresa a través de redes P2P, una conexión dedicada que no todas las compañías pueden permitirse. Es por esto que, en la práctica, este estándar todavía no ha tenido la acogida que merece dentro de las compañías españolas.
Las APIs como método para subsanar los inconvenientes del cuaderno 43
El open banking ha permitido mitigar algunos de los principales problemas de la implementación de la norma 43. Gracias a las APIs bancarias, las empresas pueden obtener sus extractos bancarios de una forma sencilla, ágil y segura e integrarlos en sus sistemas empresariales de forma automática.
La API de BBVA Business Accounts facilita esta integración. Gracias a ella, podrás ver tus movimientos bancarios en el formato AEB43 y mantener tu tesorería actualizada y contrastada con tu realidad bancaria en el momento preciso en que lo necesites. Además, podrás también integrar automáticamente el extracto de tus cuentas de BBVA en el formato AEB43 en los sistemas de tu empresa y acceder directamente a esta información en modo desasistido, en el momento en el que lo precises.
De esta manera, se mejora el flujo de la tesorería de la empresa, y se pueden tomar mejores decisiones fundamentadas en información real.
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