BBVA API Market
Si eres un programador que quiere utilizar Parse para desarrollar aplicaciones para watchOS 2 y tvOS, es momento de estar de enhorabuena.
La compañía de Mark Zuckerberg, a través de su política de Technology Partners, y por ende a través de Parse, ofrece ahora una herramienta para cada sistema operativo. Con ella posibilita el desarrollo íntegro, es decir, sin necesidad de tener que recurrir a picar código a la hora de crear sistemas subyacentes.
Las grandes novedades en este aspecto las constituyen la posibilidad de controlar notificaciones Push; el registro de usuarios; y el almacenaje y sincronización de datos en la nube, sin que nada de esto requiera de un trabajo independiente extra.
Gracias sobre todo al Software Development Kit de Facebook para tvOS , aquellos que utilicen Parse se verán beneficiados de su facilidad para integrar y acceder a las aplicaciones en sus televisores Mac, a través de una beta publicada recientemente.
El soporte de Parse para nuevas plataformas coge así un ritmo nada desdeñable, si tenemos en cuenta que la compañía acababa de lanzar la herramienta para la primera versión de watchOS. Más de 600.000 desarrolladores y dos billones de llamadas API al mes engrasan los engranajes de Parse, números susceptibles de ser ampliados dadas las facilidades con las que ahora se puede abordar el desarrollo en plataformas de la compañía de la manzana mordida.
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Llevar a un cliente por todo el proceso de compra hasta que este se formaliza es un viaje arduo y que se enfrenta a la posibilidad constante de abandono. Sin embargo, hay formas de lograr que la decisión de compra se haga realidad si se le dan facilidades como una financiación ágil, segura y adaptada a lo que necesita.
En un mundo conectado, las APIs son el pegamento que une todas las piezas que forman nuestra vida diaria. Y de la misma forma que un pegamento solo es potente si sabemos en qué material utilizarlo y conocemos sus propiedades, las APIs son tan útiles como su documentación permita.
Existen diferentes soluciones para monitorizar el rendimiento de una API, tanto en términos de tráfico como de calidad y rapidez de las respuestas que proporciona. Detectar fallos en el código o cuantificar los ingresos que genera también son algunas de las opciones que ofrecen estas útiles herramientas.
