BBVA API Market
Carlos López-Moctezuma, Global Head of New Business Models, Open Banking and Open Innovation of BBVA, participó en el último Money Live 2020, celebrado de forma telemática entre el 30 de junio y el 2 de julio, donde analizó el presente y el futuro del open banking, la redefinición de la banca en la era digital y qué pasos tienen que dar las entidades para adaptarse a este nuevo paradigma.
López-Moctezuma comenzó su intervención refiriéndose a la importancia de la digitalización, especialmente en un entorno marcado por la COVID-19. «Durante esta crisis, hemos podido comprobar cuál es nuestro nivel de digitalización y cómo nos ha ayudado a superar mejor esta situación en todos los aspectos de nuestro día a día, como pueden ser el gaming, los deportes, el comercio electrónico… Todo es mucho más abierto que hace unos años».
Esta nueva era marcada por la transformación digital, explica el Global Head of New Business Models de BBVA, desempeña un papel fundamental en cómo vivimos y en cómo nos comportamos, ya que nos permite estar permanentemente conectados de diferentes maneras. Ahora estamos más cercanos unos con otros que en el pasado. «Podemos verlo en nuestros hijos; no es que hayan cambiado su mentalidad y quieran dejar de hacer sus actividades, pero pueden complementar lo que hacían antes con nuevos dispositivos e identidades digitales. Nosotros hemos cambiado la forma en la que hacíamos la compra, por ejemplo. Y este cambio ha tenido lugar incluso en países emergentes, donde se aprecia un cambio de comportamiento de los ciudadanos».
López-Moctezuma también hizo hincapié en la importancia de la economía colaborativa en esta nueva era digital, una realidad que ya está presente en todos los sectores y actividades de nuestro día a día. «La economía colaborativa está transformando todos los sectores, por ejemplo el transporte, los espacios de trabajo, los hoteles, las compras… y permite incrementar la interacción entre los usuarios para añadir nuevas oportunidades a las que ya tenemos en nuestro día a día.»
Durante su charla, López-Moctezuma también hizo mención a la evolución del sector financiero y su adaptación a este nuevo paradigma tecnológico. «El sector financiero ha evolucionado mucho durante los últimos años. Y no solo desde el punto de vista de los servicios digitales, sino también en lo referente al contacto humano entre personas. Por ejemplo, las sucursales bancarias se han transformado en espacios más abiertos y centrados en un modelo de relaciones para comunicar productos y la forma en que se interactúa con ellos».
Esta nueva realidad, prosiguió López-Moctezuma, ha traído otros desafíos a la industria financiera, como la aparición de nuevos actores en el mercado y nuevas regulaciones, lo que ha cambiado la industria bancaria desde un monopolio de servicios financieros ofrecidos únicamente por bancos a un ecosistema donde tienen cabida otros proveedores de servicios financieros.
Esta nueva realidad tecnológica y digital es una oportunidad para innovar. Para López-Moctezuma, BBVA es uno de los bancos comerciales más avanzados en términos digitales. «En los últimos meses, hemos visto el efecto de esta estrategia digital en los resultados del banco y en los servicios ofrecidos a los clientes».
La transformación tecnológica se debe enfocar desde diferentes puntos de vista. Esta adaptación digital no es novedosa en muchos sectores, pero en la industria bancaria es disruptiva. Áreas como Banking as a Service, los datos y su privacidad, las APIs bancarias, los ERP, nuevos modelos antifraude, cloud computing, el blockchain… Cada una de estas áreas necesita de mucho trabajo para transformar un banco desde el punto de vista financiero.
Sin embargo, la transformación digital no es el único elemento importante. López-Moctezuma también apuesta por la transformación cultural para lograr estos objetivos. «Los bancos deben cambiar su mentalidad en todo lo que tiene que ver con la creación de nuevos productos, la búsqueda de nuevas metodologías y en cómo se adaptan a este nuevo ecosistema. La forma en la que gestionarán sus relaciones con las fintech, la externalización de sus servicios siguiendo estrategias de open banking y la sostenibilidad jugarán un papel cada vez más importante que no se detendrá en el futuro.»
Por último, López-Moctezuma también aludió a la necesidad de modificar los modelos de negocio, transformando los modelos bancarios tradicionales hacia nuevos modelos digitales que sirvan para satisfacer las necesidades y la experiencia de sus clientes.
Por supuesto, explica López-Moctezuma, los bancos deben ser colaborativos con el resto de actores implicados. «Ya no podemos seguir avanzando solos. Debemos ser parte activa de este cambio y colaborar en este ecosistema abierto con otros proveedores de servicios financieros.»
Nuevos productos para nuevas necesidades. Así finalizaba López-Moctezuma su intervención en el Money Live 2020. «Debemos dejar de pensar en productos para empezar a pensar en valor añadido, aprovechando el ecosistema de las fintech para desarrollar nuestra propuesta de valor a los clientes. En BBVA, por ejemplo, estamos realizando inversiones en diferentes compañías, por ejemplo, comprando una empresa de tasación inmobiliaria como Madiva, impulsando proyectos internos como Azlo, BBVA API_Market o Covault y formando parte del capital de otras empresas fintech».
López-Moctezuma también explicó la estrategia de BBVA para abordar esta transformación digital. «Estamos moviéndonos más rápido en alguno de los elementos importantes de la transformación digital y cultural y más lentos en otros, pero lo más importante es que si no damos los pasos adelante adecuados para transformar nuestra organización desde el punto de vista digital podemos acabar siendo un banco con mucho volumen, pero con poca rentabilidad».
Como resumen, López-Moctezuma mencionó alguno de los aspectos clave que deberíamos recordar de su intervención. Entre ellos:
Conforme se va potenciando su uso, las APIs se están convirtiendo en un elemento básico y esencial en la cartera de cualquier desarrollador. Pero lo realmente importante es crear productos y servicios que sean capaces de ejecutar una integración limpia y “sin costuras” en el ecosistema de un tercero. Un buen ejemplo es la alianza entre BBVA y Uber en México, que han creado todo un sistema de gestión bancaria de ganancias para sus conductores, perfectamente integrada dentro de su aplicación.
Los conductores de Uber pueden operar en su cuenta, creada ad hoc y sin tener que acudir a ninguna sucursal, sin necesidad de salir de la aplicación de Uber. «Lo más importante no es tanto la tarjeta co-branded y la cuenta en sí mismos, sino la iteración con sus usuarios», finaliza López-Moctezuma.
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