BBVA API Market
La globalización y el poder de Internet están transformando el mundo en un único mercado donde las oportunidades de crecimiento de las empresas más pequeñas también son posibles. Ahora, muchas startups no esperan cinco o diez años para tener un negocio maduro, ya que piensan que, en ese tiempo, se pierden muchos clientes fuera de sus fronteras que podrían estar interesados en su servicio. Lo cierto es que la internacionalización puede ayudar a una empresa a generar más mercado y atraer nuevos clientes pero, sin una estrategia clara, embarcarse en esta aventura puede ser un verdadero fracaso.
1. Asegura el camino
A la hora de iniciarte por primera vez en un proceso de internacionalización, muchas veces es mejor asegurar el camino para minimizar los riesgos que podría sufrir el negocio. Para ello, una buena opción es dirigirte hacia mercados con características similares al tuyo ya que, por ejemplo, te resultará más fácil integrarte en aquellos que hablen tu mismo idioma o que tengan una cultura parecida. Seguramente resulte más fácil empezar a operar en países anglosajones o de América Latina, que entrar en mercados como el chino que, aunque tiene un gran potencial, ponen más barreras a las compañías extranjeras.
2. Identifica tus oportunidades de negocio
Otro aspecto importante para reducir el riesgo a la hora de expandir tu negocio es establecer una estrategia en la que analices algunas cuestiones como las que plantea el libro ‘A playbook for Internatinal Expansions Teams‘. Cada mercado tiene sus propios matices, con su cultura, costumbres y asuntos políticos y económicos y, por ello, es necesario que reflexiones sobre aspectos como qué mercados son los más propicios para tu negocio, cuál es el momento más idóneo para expandirte, si realmente tu producto o servicio tiene oportunidades de negocio y liderazgo frente a los competidores ya establecidos, si tus competidores locales también están pensando en expandirse y cómo podría afectar eso a tu negocio, cómo integrar a tu equipo dentro de esta fase de internacionalización, cómo gestionar los múltiples recursos en diferentes localizaciones y si puede haber algún problema (regulatorio o cultural) con los servicios y productos que vas a ofrecer.
3. Analiza la necesidad de tus clientes
Las ventas y la fabricación suelen ser las razones más comunes por las que compañías expanden sus negocios al extranjero sin tener muy en cuenta un factor que también es crucial: el servicio al cliente. Para no perder una buena atención al usuario en tu proceso de internacionalización, tienes que tener en cuenta aspectos tan básicos como si los clientes potenciales en los nuevos mercados van a requerir un servicio presencial; si es posible ganar más clientes ofreciendo dicho servicio o si, por el contrario, no dispones de oficinas en el país en el que has decidido expandirte; si los gastos del viaje serán iguales o superiores a los gastos de personal dedicados a ese servicio al cliente en el extranjero y si podrías perder clientes si la respuesta de servicio es lenta o esporádica.
4. Busca socios estratégicos
Otra de las recomendaciones en la que coinciden muchos expertos es la necesidad de buscar y aliarse con socios estratégicos para afianzar y acelerar la expansión en otro mercado. La búsqueda de partners puede ayudarte en la medida en la que esas empresas conocen el mercado interno y poseen redes existentes que pueden facilitar una conexión temprana de tu negocio con el nuevo mercado al que te diriges. Tener un socio o, incluso, hacer una pequeña adquisición puede abrirte las puertas a grandes oportunidades y facilitarte la consecución de nuevos recursos o el uso de tecnologías patentadas, entre otras ventajas.
Para ello, también es muy importante establecer un grupo de contactos en Internet. En este sentido, a través de redes sociales, como LinkedIn, puedes establecer vínculos con profesionales de otros sectores y geografías, alto que te puede aportar una valiosa información.
5. Arriesga con inteligencia
Como hemos comentado, una estrategia internacional de éxito comienza con el respaldo de una amplia investigación, una fuerte red de contactos y bastante coraje. Este último concepto es muy importante ya que el empresario es un profesional acostumbrado a tomar riesgos, pero existe una forma de arriesgarse inteligentemente. Por eso, siempre siempre es recomendable valorar los riesgos y considerar el peor resultado posible para tomar la mejor decisión.
Finalmente, queremos terminar con un buen ejemplo de crecimiento de negocio e internacionalización. La red social Pinterest, con apenas cuatro años de vida y más de 70 millones de usuarios registrados está en pleno proceso de expansión hacia Europa y América Latina. Según Matt Crystal, responsable de la división internacional de Pinterest, la compañía tiene casi el 30% de nuestros usuarios fuera de EE.UU. y la web ya está disponible en 32 idiomas.
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